Coincidiendo con el trigésimo aniversario de la independencia de Croacia, el Instituto Monetario de tes país ha lanzado una doble emisión conmemorativa, compuesta por sendos estuches de lujo que contienen unas reproducciones en oro y plata de las primeras monedas circulantes acuñadas en el país en 1993.
El pasado 25 de junio se cumplieron 30 años desde la proclamación de la independencia de Croacia, apenas tres meses después de que se desencadenara la Guerra de los Balcanes.
Ese día, el Parlamento croata aprobó la histórica decisión de separarse de la Federación Yugoslava, decisión adoptada tras un referéndum en el que el 93,24% de la población votó por una Croacia soberana e independiente.
Una de las primeras decisiones que adoptó el recién nacido país, el 23 de diciembre de 1991, fue la acuñación de una moneda propia de transición, el dinar croata, que solo circuló en forma de billetes bancarios.
Por fin, el 30 de mayo de 1994 comenzaron a acuñarse la nueva moneda croata, el kuna, que sustituyó al dinar que se había adoptado tras la independencia. A diferencia de aquel, el kuna sí comenzó a circular en forma de monedas. En concreto, el primer cono monetario incluía nueve denominaciones: 1, 2, 5, 10, 20 y 50 lipa (la moneda fraccionaria), y 1, 2 y 5 kuna.
En cuanto a su diseño, las piezas de valor inferior a 1 kuna mostraban diversas plantas típicas del país, mientras que las de 1,2 y 5 kuna incluían imágenes de tres animales: el ruiseñor, el atún y el oso pardo.
Curiosamente, Croacia es uno de los pocos países del mundo cuyas monedas llevan el nombre de un animal y una planta: el kuna toma su nombre de la marta (llamada kunovina o marturina) y el lipa, del tilo de hoja ancha (vejdova lipa).
Emisión conmemorativa especial
Ese primer cono monetario croata ha sido escogido por el Banco Nacional de Croacia y por el Instituto Monetario para emitir sendos juegos de monedas en oro y plata para conmemorar el 30 aniversario de la independencia del país.
El diseño del anverso y reverso de ambas colecciones de monedas es el mismo que tenían las monedas de kuna y lipa en sus distintas denominaciones. Su autor es el escultor Kuzma Kovačić.
La serie de monedas de oro están acuñadas en oro de 999,9 milésimas de pureza, calidad proof. Su peso oscila entre los 4,89 gramos de la de 1 lipa y los 16,46 gramos de la de 5 kuna. Las seis monedas de lipa tienen el canto liso, mientras que las tres de kuna lo tienen estriado.
Es importante señalar que la ceca croata ha mantenido las dimensiones de las monedas originales, tanto en oro como en plata, que van desde los 17 milímetros de diámetro de la de 1 lipa a los 8,94 milímetros de la de 5 kuna.

La emisión de monedas de oro está limitada a apenas 30 unidades, que se presentan en un lujoso estuche de madera con un diseño ajedrezado que recuerda a una versión en tres dimensiones del elemento heráldico croata.
Las maderas con las que se ha elaborado el estuche son de roble y de olivo, árboles que también están presentes en las monedas croatas. Las monedas se presentan en cápsulas individuales, dentro de sendos cubos de madera que se pueden extraer del estuche.
En cuanto a la versión en plata de 999 milésimas de pureza, calidad proof, tiene las mismas dimensiones que las de oro, mientras que el peso oscila entre los 2,65 gramos de la moneda más pequeña a los 8,94 gramos de la de mayor denominación.

La emisión de monedas de plata está formada por un total de 300 ejemplares, que se presentan también en un estuche muy particular, que reproduce el llamado cuadrado croata y que está hecho de madera de roble.
Cada una de las monedas de plata se presenta en una cápsula insertada en un cuadrado de madera de tilo.
El diseño de ambos embalajes ha sido realizado por Izvorka Jurić y Jelena Gvozdanović.
Se trata de unas piezas conmemorativas de gran valor para los coleccionistas, ya que, a partir de 2023, Croacia adoptará el euro, con lo que tanto las monedas de kuna como las de lipa desaparecerán.