Uno de los personajes más legendarios del folklore británico es Robin Hood, el ‘buen ladrón’ que robaba a los ricos y poderosos para dárselo a los pobres y oprimidos, y que se escondía en la espesura del bosque de Sherwood, cerca de Nottingham. Su figura es la primera que aparece en la nueva serie dedicada a este mito, con sendas monedas de una onza de oro y plata.
La Royal Mint, Casa de la Moneda del Reino Unido, vuelve a recurrir al folklore británico como inspiración parea una nueva emisión de monedas de oro y plata, en calidad bullion.
La emisión constará de tres monedas de una onza de oro y tres de una onza de plata, dedicadas al mítico héroe de los bosques de Sherwood, Robin Hood; a su amada, Lady Marian; y a su fiel lugarteniente, Little John.
La pieza emitida en 2021 está dedicada al protagonista, al propio Robin Hood, el rebelde arquero que se enfrentó al sheriff de Nottingham y al príncipe Juan, robando a los ricos para mejorar las condiciones de vida de los oprimidos.
El mito de Robin Hood
¿Existió en realidad Robin Hood? Según los historiadores, la leyenda hace referencia a un personaje que vivió en la Inglaterra del siglo XII o XIII. Las primeras referencias literarias a Robin Hood datan de los siglos XIV y XV, y hablan de un forajido que vivía con su banda en el bosque de Sherwood y se enfrentaba regularmente con los hombres del sheriff de Nottingham.
Los detalles sobre este personaje y su vida fueron variando, hasta que en obras literarias posteriores se definieron algunos de los rasgos que han dado forma al personaje que ha llegado hasta nosotros. Por ejemplo, en la obra “History of Greater Britain”, publicada por John Major en 1521 se le define como un fiel seguidor del rey Ricardo I de Inglaterra, conocido como Ricardo Corazón de León.
Por aquel entonces se estableció también su rivalidad con el usurpador del trono, el príncipe Juan, hermano menor del rey, quien se aprovechó de la ausencia de éste, que había acudido a luchar en la Tercera Cruzada, para liberar Jerusalén del dominio de Saladino.
La literatura posterior también le rodeó de los famosos personajes que han llegado hasta nuestros días: su fiel lugarteniente, Little John; su amada Lady Marian; o el fraile Tuck.
Diseño
El diseño es el mismo en las monedas de oro y plata y es obra, tanto el anverso como el reverso, de Jody Clark.
El anverso de la moneda muestra el último retrato de la reina Isabel II de Inglaterra realizado por Jody Clark para la Royal Mint, que se usa en sus monedas desde 2015.
Alrededor figura la leyenda tradicional “ELIZABETH II D. G. REG. F. D.” (“Isabel II, reina por la Gracia de Dios y Defensora de la Fe”) y el valor facial de la moneda: 100 libras, en el caso de la de oro; y 2 libras, en la de plata.
El campo de anverso y reverso de ambas monedas está realizado con una textura con puntos diminutos que dificulta la falsificación de las mismas.
El reverso muestra el diseño de Jody Clark, con Robin Hood subido a las ramas de un árbol en el bosque de Sherwood, con el arco en tensión,.
A su alrededor aparece el nombre del personaje a punto de disparar una flecha, “ROBIN HOOD”; el peso, “1 oz.”; el metal y su pureza (“FINE GOLD 999.9” o “FINE SILVER 999”); y el año de emisión, 2021.
Una onza de oro y plata
La pieza de una onza de oro tiene un valor facial de 100 libras esterlinas, y está acuñada en oro de 999,9 milésimas, calidad bullion. Contiene exactamente una onza troy de oro puro (31,10 gramos) y mide 32,69 milímetros de diámetro, con el canto estriado.
La de plata tiene un valor facial de 2 libras esterlinas. Está acuñada en plata de 999 milésimas, con calidad bullion. Su contenido en plata pura es de una onza troy y mide 38,61 milímetros de diámetro.
Según la información facilitada por la Royal Mint, ambas piezas están consideradas como bullion y están exentas del impuesto sobre las ganancias de capital para los ciudadanos británicos.