La primera vez que me hice con un catálogo numismático fue cuando todavía era un adolescente. Me llamó especialmente la atención que en el mismo figurara la Orden de Malta como emisor de moneda. ¿Suena como muy medieval, no? Es normal que lo suene, ya que la Soberana Orden Militar y Hospitalaria de San Juan de Jerusalén, de Rodas y de Malta, más conocida como la Orden de Malta, fue fundada en Jerusalén en el Siglo XI por unos comerciantes de Amalfi, una ciudad cercana a Nápoles.
No está muy clara la fecha de fundación, pero sí se sabe que en 1048 el califa de Egipto Bomesor Monstensaf permitió a la Orden construir una iglesia y un hospicio para acoger a los viajeros que regresaban de su peregrinación a Jerusalén. Además de gestionar hospitales, también eran guerreros, y se enfrentaron a los ejércitos musulmanes durante las cruzadas. En 1291, con la caída del Reino Cristiano de Jerusalén, la organización se estableció en Chipre, de donde se mudó a Rodas hasta que fue asediada por los musulmanes en 1522, y después a Malta, donde permanecería hasta la llegada de las tropas napoleónicas en 1798.
A día de hoy, la Orden de Malta tiene asiento en la Asamblea General de la ONU en categoría de observador y su Gran Maestre tiene la categoría de jefe de Estado, pero son mucho más conocidas las obras de caridad que realiza en todo el mundo ya que a día de hoy sigue gestionando hospitales.
Raimundo Rabassa de Perellós y Roccafull, Gran Maestre de la Orden de Malta
Ahora que os he puesto en contexto, me gustaría hablaros de esta pieza de 1 grano de 1709 con la que me hice en una venta directa. Su diseño os puede recordar a las blancas del “agnus dei” o cordero de Dios, que había acuñado el rey Juan I de Castilla, aunque el reverso ya nos muestra la famosa cruz de Malta. Pero lo que más me sorprendió fue quién era el Gran Maestre de la Orden de Malta en ese momento, el valenciano Raimundo Rabassa de Perellós y Roccafull. Me llamó la atención sobre todo porque la mayoría de monedas que había visto a la venta, sobre todo en internet, eran de Emmanuel de Rohan.
Indagando un poco, descubrí que este señor ya provenía de la alta nobleza valenciana del momento. Su familia materna estaba muy ligada a la Orden, ya que dos de sus tíos eran comendadores de la misma. Siguiendo la tradición familiar ingresó en ella con tan solo 16 años. Con su reciente ingreso, fue enviado a Malta donde participó en expediciones navales contra los piratas berberiscos y la armada turca, llegando a ser premiado con la bailía de Negroponte en 1686. Este título le sirvió para ascender en la Orden y pertenecer al Soberano Consejo. Más tarde pasaría a ser Comendador en Torrent y tras la muerte del Gran Maestre Vignacourt, sería designado sucesor.
Como Gran Maestre, realizó diversas reformas sobre todo en contra de la corrupción que existía en la Orden en ese momento regulando las concesiones de las Grandes Cruces y otros privilegios de la Orden. También mejoró las defensas de sus posesiones, pero sobre todo de su flota ya que hacía más de 80 años que la flota de la Orden estaba en inferioridad con respecto a la otomana y berberisca. En 1704 el Gran Maestre mandó construir 3 navíos de guerra: el “San Raimundo”, el “San José” y el “San Vicente”. El encargado de este proyecto fue el caballero normando Saint Pierre, que en 1706 apresaría un gran barco de un almirante tunecino que rebautizaría como “Santa Cruz”. Gracias a esta renovación, la Oren fue capaz de detener la piratería en el Mediterráneo entre 1713 y 1714.
Durante la Guerra de Secesión española, trató de mantenerse neutral, pese a tener familiares de la nobleza valenciana partidarios de Felipe V. No sería hasta prácticamente el final de la guerra, en 1711, que el Gran Maestre decidiría ayudar con su flota a tomar Mallorca, que estaba dominada por los partidarios de Carlos III el Pretendiente.
Batalla naval Orden de Malta contra los turcos
También es famosa la labor de mecenazgo realizada por el Gran Maestre como mecenas encargando, entre otras cosas el grupo escultórico de “El bautismo de Cristo” que preside el altar mayor de la concatedral de La Valetta.
Espero que hayáis disfrutado este artículo tanto como yo cuando me encontré con esta moneda.