El Double Eagle de oro de 1933 diseñado por Augustis Saint Gaudens es una de las monedas más famosas del mundo. Ahora une a esa condición el título honorífico de la moneda más valiosa del mundo, después de que Sotheby’s la haya subastado en Nueva York el pasado 8 de junio por la escalofriante cifra de 18,87 millones de dólares, superando ampliamente las previsiones que situaban el remate entre los 10 y los 15 millones.
La moneda, de 20 dólares de valor facial y considerada como una de las más bellas acuñadas en los Estados Unidos, ha batido el récord que desde 2013 ostentaba el dólar de plata conocido como ‘Flowing Hair’ (la primera moneda acuñada por la US Mint, en 1794), con 10 millones de dólares.
La firma Sotheby’s fue la encargada de subastar la pieza, propiedad del coleccionista, diseñador y filántropo Stuart Weitzman, quien la había adquirido en una subasta previa en 2002, por 7,59 millones de dólares.
El precio del remate fue de 18.872.250 dólares, muy por encima de las expectativas de los especialistas, que esperaban cerrar la venta por entre 10 y 15 millones.
El elevado precio pagado por la pieza pone de relieve que se trata de una de las monedas más codiciadas del mundo, con una historia fascinante. Se trata del único ejemplar de esta moneda que puede estar en manos privadas sin vulnerar las leyes de los Estados Unidos.
Cuando Weitzman la adquirió, en 2002, era el propio Gobierno de los Estados Unidos quien la subastaba. De hecho, a la conclusión de la subasta, el director de la United States Mint firmó un Certificado de Monetización que la convertía en moneda de curso legal en los Estados Unidos.
80 años de intrigas
La historia de esta moneda está plagada de intrigas. Acuñada en 1933 como la última moneda circulante de oro de Estados Unidos, puso fin a una tradición de acuñación de piezas de este metal que se remontaba al año 1795.
Su diseño corrió a cargo del prestigioso escultor Augustus Saint-Gaudens, por encargo del presidente Theodore Roosevelt, quien consideraba que el diseño de las monedas estadounidense era mejorable.
Saint-Gaudens creó la imagen de la Libertad caminando, para el anverso, y del águila estadounidense en pleno vuelo, conformando una pieza que muchos consideran como la más bella jamás acuñada en los Estados Unidos.
Sin embargo, tanto esta moneda como las demás que fueron acuñadas en 1933 no llegaron a circular, ya que la Orden Ejecutiva 6102, firmada en abril de ese año por Franklin D. Roosevelt prohibía la posesión de oro en forma de monedas, certificados o en bruto por parte de los ciudadanos estadounidenses.
El Gobierno ordenó la destrucción de todas las piezas de esta emisión, excepto dos, que se conservarían en el Instituto Smithsoniano. Sin embargo, en 1937 salieron a la luz varias piezas que habían escapado a la fundición, lo que obligó a poner en marcha una investigación del Servicio Secreto estadounidense, en 1944, que concluyó que habían sido robadas al Gobierno y declaró ilegal su posesión.
Pese a esta decisión, una de las monedas fue vendida y se le concedió por error un permiso de exportación, lo que permitió que acabara en la famosa colección numismática del entonces rey Faruq de Egipto.
Tras el derrocamiento de éste, el nuevo Gobierno de la República de Egipto subastó la colección en Sotheby’s en 1954, pero el Gobierno de EEUU confiscó el Double Eagle, que permanecería en paradero desconocido hasta 1996, en que fue incautada durante una operación del Servicio Secreto en el Hotel Waldorf Astoria de Nueva York.
Tras una batalla legal de cinco años, en la que se puso de manifiesto la errónea concesión del permiso de exportación, el caso se cerró y este Double Eagle se ofreció en subasta, convirtiéndose en el único que podía pasar a manos privadas.
En 2005 aparecieron más piezas, en manos de una familia que ya había sido investigada en 1944 por el supuesto robo de las mismas. El Gobierno de los Estados Unidos las confiscó, por lo que el Double Eagle adquirido en 2002 por Weitzman sigue siendo el único disponible.
De momento, el comprador de la pieza en la subasta celebrada el pasado 8 de junio permanece en el anonimato. Su anterior propietario, Stuart Weitzman, ha declarado que utilizará el dinero obtenido para financiar algunos de los planes de su fundación, entre los que se encuentra la construcción de un Museo Judía en Madrid.
Aunque, ahora mismo, el Double Eagle de 1933 es la moneda más valiosa del mundo, este título honorífico podría cambiar de nuevo el próximo mes de octubre, cuando se volverá a subastar el dólar de plata ‘Flowing Hair’, que alcanzó los 10 millones de dólares en 2013.